Una vez identificado el consumo que haces del plástico, tanto en cantidad como en tipo de residuos y objetos, construye un plan que te ayudará a decir adiós a una gran parte del plástico que consumes.
Se puede empezar el proceso reduciendo los residuos por etapas: primero las bolsas de compras, luego las botellas, posteriormente los envases para conservar alimentos. A la par puedes ir sustituyendo el plástio por artículos de madera o bambú: cepillos, peines, juguetes, etc.